La contaminación del agua por mercurio ha aumentado de forma considerable en los últimos tiempos, y esto puede afectar negativamente al consumidor (especialmente mujeres embarazadas y niños) y al medio ambiente.
El mercurio es un metal brillante de color blanco plateado que se encuentra en pequeñas cantidades en la corteza de la tierra. Pese a ser un metal, a temperatura ambiente el mercurio se encuentra en estado líquido, y puede evaporarse lentamente en el aire.
¿Cómo puede aparecer el mercurio en el agua potable?
El mercurio, que se dispersa a través del aire y la lluvia, se encuentra en el medio ambiente principalmente a causa de la liberación de mercurio procedente de las rocas y el suelo; la combustión de carbón y crudo que contienen pequeñas cantidades de mercurio; la liberación de mercurio procedente de fundiciones metálicas; y la incineración de materiales que contienen mercurio, como las baterías.
Una vez ingerido el mercurio actúa como una neurotoxina, interfiriendo con el sistema nervioso y generando diversos problemas de salud. Se ha demostrado que perjudica a la fertilidad y la presión arterial, además de causar pérdida de memoria, temblores y entumecimiento.
No obstante no hay razón para alarmarse. Los controles son muy frecuentes por parte de gobiernos y comisiones de regulación, ya que es muy importante para evitar su ingesta accidentalmente.
Si los niveles de mercurio son altos debe emplearse agua mineral o una máquina de ósmosis tanto para beber como para cocinar, ya que la ingesta continua a largo plazo puede provocar efectos tóxicos para la salud.
En Aquafuentes trabajamos por mantener los niveles de agua aptos para su consumo, no dude en consultarnos y le ofreceremos las mejores opciones del tratamiento de aguas para su hogar o su negocio.
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